EL PORSCHE 907
Porsche 907: Un Icono de la Competición en la Era Dorada del Automovilismo
El Porsche 907 es uno de los modelos más emblemáticos en la historia del automovilismo, representando la evolución de la marca alemana en el mundo de la resistencia. Diseñado para competir en las 24 Horas de Le Mans y otros campeonatos de resistencia, este vehículo supuso un salto cualitativo en tecnología y aerodinámica para Porsche.
Historia y Evolución
El Porsche 907 debutó en 1967, desarrollado como sucesor del 906 con el objetivo de mejorar la aerodinámica y la velocidad punta. Se destacó por su diseño alargado y perfil bajo, optimizado para circuitos rápidos. A diferencia de su predecesor, el 907 incorporó un habitáculo de conducción a la derecha, siguiendo la tendencia de los autos de Le Mans para optimizar la visibilidad en curvas.
El modelo logró sus primeros grandes éxitos en 1968, ganando en Daytona y Sebring, lo que consolidó a Porsche como un fabricante serio en la categoría de resistencia. Con variantes de distinta cilindrada y configuraciones mecánicas, el 907 fue fundamental en la transición hacia modelos posteriores como el legendario Porsche 917.
Características Técnicas
El Porsche 907 presentaba un chasis tubular de aluminio extremadamente ligero, combinado con una carrocería de fibra de vidrio que le permitía alcanzar una relación peso-potencia excepcional. Su aerodinámica optimizada mejoró la estabilidad en rectas largas y curvas de alta velocidad.
Dependiendo de la versión, el 907 montaba dos tipos de motores:
- Motor de 2.0 litros: Un seis cilindros bóxer con inyección mecánica que entregaba aproximadamente 220 CV.
- Motor de 2.2 litros: Variante evolucionada con mayor potencia y par motor.
- Motor de 2.7 litros: En sus últimos desarrollos, alcanzaba los 270 CV, lo que le permitía superar los 300 km/h en recta.
Combinado con una transmisión manual de cinco velocidades y una configuración de suspensión independiente, el 907 ofrecía un comportamiento ágil y una gran precisión en curvas.
Experiencia de Conducción
Conducir un Porsche 907 es una experiencia extrema y reservada para pilotos experimentados. Su bajo peso, unido a la alta carga aerodinámica y una respuesta de motor explosiva, exige manos expertas para aprovechar su potencial. La posición de conducción a la derecha puede resultar extraña para algunos pilotos modernos, pero en su época suponía una ventaja en circuitos como Le Mans.
Gracias a su gran estabilidad en curvas de alta velocidad y a la precisión de su dirección, el 907 sigue siendo un coche competitivo en eventos históricos. Sin embargo, su escasa electrónica y la necesidad de mantener el motor en un rango de revoluciones óptimo lo convierten en un vehículo desafiante.
Valor en el Mercado
El Porsche 907 es una pieza codiciada en el mercado de vehículos clásicos. Dada su rareza y su importancia histórica, las unidades en buen estado pueden superar los 4 millones de euros en subastas especializadas. Su exclusividad, combinada con su impacto en la historia del automovilismo, lo convierten en una de las joyas más valiosas del mundo de los autos de competición.
Conclusión
El Porsche 907 representa una época dorada en la historia del automovilismo. Con un diseño adelantado a su tiempo y un legado en competiciones de resistencia, sigue siendo un referente en el mundo de los coches clásicos. Su exclusividad y prestaciones lo convierten en un objeto de deseo para coleccionistas y entusiastas del automóvil.